2 mar 2009

El teatro de la vida

Ella siente los rayos de sol rozando la tez de su cara. Intenta abrir los ojos pero algo le dice que es mejor que no lo haga. Intenta seguir deleitandose en las mieles de su sueño. Durante la noche pasada tuvo todo lo que deseaba en las manos... todo parecía tan tangible, tan real.

Ahora ella se pregunta ¿ esto es la realidad? el estar aquí, ahora, sintiendo el sol en mi cara y temer abrir los ojos tan solo por pensar que me puedo sentir en medio de la nada. De una absoluta irrealidad que me envuelve y me obliga a someterme a cada gota de rutina que repiquetea contra los cristales de su jornada.

Entonces ... ella se plantea si realmente lo que creemos como realidad, la VERDAD , es tal y como la pensamos. Para ella la realidad es el levantarse todos los dias, ducharse, vestirse, irse, verlo, no poder tenerlo, escuchar un monton de falacias e ironías por parte de los seres que la rodean en ese mundo aparte que llaman " sistema educativo". Para ella es real el llegar a su casa, ver las mismas caras de siempre , o bien sonrientes, o bien reprochando cada mínimo tropezón que su alocada y torpe cognoscencia.

y así los minutos pasan... tic tac tic tac, el reloj late en su muñeca y sabe que debe abrir los ojos, y debe enfrentarse al mundo. Sabe que hoy tendrá que ponerse el vestido de " super señorita" , que tendrá que afrontar esos comentarios irónicos e hirientes de la pandilla de " somos Way" de siempre, que tendrá que sonreír y mirarlo a escondidas intentando aparentar que no le ve, que simplemente es como si no existiera, o al menos, como si no fuera vital.

Ella sigue pensando, sigue planteandose porque debemos creer que cuando abrimos los ojos i nos levantamos de nuestras camas estamos viviendo lo que comunmente llamamos realidad. Por que creemos que la realidad es eso? alomejor estamos en un sueño que aparentemente es eterno, pero tras la muerte, es como un despertar, un ser consciente de tu posición en este universo infinito.

Ella finalmente se rinde al apremiante sonido del tictaqueo de su reloj y abre los ojos.


Se pone en pie, se estabiliza, y hace todas aquella cosas que requiere el alistarse. Se sienta en una esquina junto a la ventana. Saca su cajetilla del bolso, saca un cigarro y lo enciende. Lo mira durante unos segundos, pensando por que se metera esa porqueria en el cuerpo pero finalmente decide dar una calada y más tarde continúa en una confluencia de pensamientos y nubes de humo que salen de su alma.

Sigue pensando .... y así pensando pensando, me encuentro escribiendo aquellos pensamientos que mi cerebro destila como ácido que queman los días que suceden

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